miércoles, 27 de mayo de 2009

Presentación

Pensamiento mágico-religioso y paradojas científicas actuales. ¿Dos caminos hacia un mismo objetivo?

Los textos que se presentan en este blog son el resultado de muchas lecturas y de muchas horas de investigación y de reflexión personal, acerca de un tema que siempre me pareció apasionante. La elaboración de estos textos responde a un deseo, también personal, de compartir los datos, las historias y las reflexiones que se han reunido y generado a través de esta inquietud personal acerca de mí mismo y del Universo que me rodea. El tema central de estos textos, eslabonados uno con otro, es el siguiente: aunque durante mucho tiempo permanecieron en campos distintos, e incluso antagónicos, del quehacer humano, existen hoy ciertos indicios de acercamiento del pensamiento mágico-religioso con interpretaciones referentes a las conclusiones experimentales de la Ciencia de vanguardia, especialmente en el caso de la Física Moderna. La intención de los textos presentados en este blog es hacer un recuento de estos puntos de contacto, explicados de manera sencilla y precisa, para alentar un debate que nos permita proponer algunos intentos de respuesta a preguntas básicas que han acompañado al ser humano desde su aparición: ¿qué somos?, ¿de dónde venimos?, ¿cuál es el origen y la esencia de todo lo que nos rodea?, ¿cómo podemos conocer la verdadera naturaleza de todo?, ¿cuál es nuestro destino individual?, ¿existirá una finalidad, una razón de ser, para nosotros y para el Universo?, ¿alguna vez concluirá el Universo?, ¿existe Dios?... Aclaro que no existe en los textos aquí presentados ninguna intención doctrinaria o dogmática, sino únicamente una serie de propuestas, de “provocaciones” intelectuales, cuya finalidad es despertar la curiosidad, la reflexión, el intercambio de ideas… Que cada uno, con absoluta libertad individual, llegue a sus propias conclusiones y elabore sus propias respuestas…

INTRODUCCIÓN

El ser humano abrió los ojos –real o metafóricamente- en algún momento de la prehistoria y se halló de pronto frente al Universo. Observó los frutos del campo, las plantas y los animales que vuelan por el aire, caminan por la tierra o nadan en las aguas. Observó los eventos naturales y miles de preguntas debieron surgir en su mente: ¿Quién hacía llover?, ¿quién movía la tierra?, ¿quién hacía estallar los truenos durante las tormentas?, ¿quién enviaba el granizo?, ¿por qué enfermaba?, ¿qué era el sol?, ¿qué era la luna?, ¿qué eran las estrellas?,… Ningún humano, en ninguna época, en ningún lugar, ha podido quedar indiferente ante semejante espectáculo. Inmediatamente su cerebro ha de ponerse en marcha. Hemos heredado la necesidad imperiosa de agrupar todos los elementos dispersos de información para reunirlos en un conjunto coherente: buscamos siempre explicaciones. Y ese no es un proceso voluntario ni enteramente conciente.

Así, el ser humano construyó respuestas: A juzgar por los temblores de tierra que de vez en cuando estremecían el suelo y por el fuego que a veces arrojaban ciertas montañas, era más que probable que en el subsuelo habitaran demonios furiosos y malvados. Sin duda algunos espíritus maléficos descendían de los cielos generando abrasadoras descargas, arrojando trozos de hielo que destrozaban a las plantas y ocasionando misteriosos males que debilitaban, hacían sufrir y mataban a los seres vivos. Pero también existían espíritus benignos y sublimes que entregaban calor, luz y lluvia, estos espíritus debían pertenecer a los auténticos dioses, inmutables, majestuosos y perfectos, que recorrían la esfera celeste de día y de noche brillando esplendorosamente. Los cambios en el Universo entero y en el interior del humano eran obra de la lucha eterna entre los espíritus malignos y los espíritus benignos, en conflicto perpetuo por el predominio universal y el alma humana.

El ser humano, enfrentado al Universo, siente que él forma parte de todo aquello; más aún: siente que él y el Universo son una sola cosa, el mundo es él mismo. Quizá por eso, desde el principio, el humano ha intentado manipular esas incomprendidas fuerzas de la naturaleza y ha ideado mil técnicas para lograrlo. La historia de los intentos humanos por lograr este objetivo nos lleva de la magia a la ciencia, de lo irracional a lo racional, de la fe al conocimiento. Esta búsqueda no ha terminado, y acaso nunca termine. Pero ocurre que hoy, alrededor de 20,000 años después de iniciar esa búsqueda, luego de haber recorrido un vertiginoso camino hacia el conocimiento y el dominio de la naturaleza, nos encontramos con que magia y ciencia, irracionalidad y racionalidad, fe y conocimiento, están más cerca que nunca. Perplejos, azorados ante nuestro insólito descubrimiento, nos detenemos y dudamos. Parafraseando al astrónomo Carl Sagan, somos fragmentos de estrellas que, después de haber recorrido un largo camino, volvemos la vista atrás para preguntarnos dónde estamos, de dónde venimos, a dónde vamos, quiénes somos, qué somos…

Capítulo XXXXXX

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Capítulo XXXXXX

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Capítulo XXXXXX

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sábado, 9 de mayo de 2009

Fuentes empleadas en este blog

Acosta, Virgilio; Cowan, Clyde y Graham, B. Curso de Física Moderna. Edit. Harla, México, 1983, 512 pp. (Serie: “Textos de Ingeniería”).
Texto académico universitario. Obra técnica rigurosa: uno de sus requisitos es el dominio del cálculo elemental, incluyendo bases de cálculo vectorial. Se trata de un curso completo, aunque no especializado, de las bases fundamentales de la Física Moderna (Relatividad Especial y Mecánica Cuántica) destinado a estudiantes de los primeros semestres de carreras de Ingenierías. Lo tomo como base para comprender cabalmente los conceptos e ideas matemáticas que se desarrollarán en el blog, puesto que difícilmente podría explicar ideas que no dominara.

Resnick, Robert. Conceptos de Relatividad y Teoría Cuántica. Edit. Limusa, México, 1981, 271 pp.
Mismo caso que el libro anterior. En este caso, los desarrollos teóricos van de la mano con las herramientas matemáticas. En ese sentido, aunque es un texto académico y técnico, resulta más asequible. Lo tomo como un complemento del anterior y con la misma finalidad.

(Aclaro que en ningún momento usaré lenguaje matemático para expresar las ideas vertidas en este blog. Pero si alguno de los lectores está interesado en un desarrollo matemático más riguroso, con gusto le haré llegar lo que requiera)

Gribbin, John. Física Cuántica. Guía para principiantes sobre el mundo subatómico. Edit. Planeta, México, 2004, 72 pp. (Colección: “Ciencia al día”).
Se trata de un pequeño compendio que explica de manera sencilla los principios básicos, las paradojas sin resolver y las aplicaciones prácticas de la Física Cuántica, desde sus orígenes hasta los proyectos que actualmente se están planteando, sobresaliendo la posibilidad de la teleportación.

Schwartz, Joseph y McGuinness, Michael. Einstein para principiantes. Edit. Errepar, Buenos Aires, 1997, 168 pp.
Se trata de un libro introductorio a la Teoría de la Relatividad, que inicia desde los orígenes de las matemáticas en Babilonia y las primeras mediciones de la velocidad de la luz realizadas por los etruscos, pasando por las ideas de Galileo, Newton y Faraday, hasta llegar a la génesis y las consecuencias cosmológicas y filosóficas de los postulados de la Teoría de Einstein, muchas de las cuales, por cierto, no fueron del agrado de su autor.

McEvoy, J. P. y Zárate, Oscar. Stephen Hawking para principiantes. Edit. Errepar, Buenos Aires, 1996, 175 pp.
Un libro introductorio a las teorías e ideas del que es considerado como el físico sucesor de Einstein. El texto explica los esfuerzos de Hawking por armonizar las dos más grandes teorías de la Física Moderna: la Relatividad y la Cuántica, y cómo estos esfuerzos lo han llevado a realizar descubrimientos asombrosos al someter a ambas teorías, de manera simultánea, al estudio de las condiciones más extremas de la naturaleza: los agujeros negros. De esta manera, Hawking ha establecido su teoría de la gravedad cuántica que explicaría las fluctuaciones cuánticas y el falso vacío, puntos de partida para tratar de entender qué es el Universo y cómo lo percibimos.

Hawking, Stephen. Historia del tiempo. Planeta-Agostini, Barcelona, 1992, 251 pp.
Obra de divulgación de uno de los más afamados físicos actuales. Se centra en tratar de responder tres preguntas: ¿de dónde viene el Universo?, ¿cómo y por qué empezó?, ¿tendrá un final y cómo sería? Al buscar respuestas a estas preguntas, el autor hace un recorrido histórico acerca de las concepciones del Universo desde la Antigüedad hasta hoy, y concluye que, en verdad, no estamos más seguros acerca del Universo de lo que estuvieron nuestros ancestros. Sabemos más que ellos, pero las preguntas básicas siguen sin respuesta. En esencia, con lo que hoy sabemos, casi no tendríamos argumentos para rebatir la idea de que el Universo es una plataforma plana sustentada por el caparazón de una tortuga gigante, como se creyó alguna vez. En realidad, nuestro progreso en la comprensión del Universo solo ha creado un pequeño rincón de orden en un Universo cada vez más desordenado. La gran apuesta del autor es la búsqueda de una teoría que unifique a la Física y nos permita, apenas, iniciar la discusión de por qué existe el Universo y por qué existimos nosotros. La respuesta a estas preguntas sería nuestro triunfo definitivo como especie, pues conoceríamos el pensamiento de Dios.

McEvoy, J. P. y Zárate, Oscar. Teoría Cuántica para principiantes. Edit. Errepar, Buenos Aires, 2003, 176 pp.
Libro introductorio a la Mecánica Cuántica, que hace un recorrido histórico a través del desarrollo de esta teoría y sus principales postulados, para después explicar de manera simple las extrañas paradojas de la Cuántica que contradicen la lógica científica y desafían los conceptos filosóficos vigentes:
Según la propiedad de no-localidad, en el nivel más básico de la materia, las subpartículas parecen tener conciencia de lo que sucede a su alrededor sin limitaciones espaciales o temporales.
El principio de incertidumbre impone un límite estricto a la percepción y al conocimiento de la realidad que no proviene de nuestra incapacidad, sino de la propia naturaleza de la realidad.
El principio de dualidad cuestiona a la realidad misma al postular que todo es paquetes de ondas y grupos de partículas al mismo tiempo, depende de lo que queramos ver.
Finalmente, el libro describe las dos paradojas más profundas y extrañas de la Cuántica, que no han podido ser resueltas satisfactoriamente hasta hoy: la paradoja del gato de Schrödinger y la paradoja EPR-Teorema de Bell.


Trefil, James. La cara oculta del Universo. Planeta, Barcelona, 1990, 218 pp.
Libro de divulgación que se centra en uno de los debates más encendidos de la Física actual: la materia oscura. Existen muchos indicios indirectos de que la materia que conocemos es solo una de sus manifestaciones y de que existen otras formas de materia que no hemos descubierto aún. Estas formas desconocidas de materia son, de hecho, las más abundantes en el Universo (90% aproximadamente) y determinan las características de la realidad que observamos. El texto aborda este problema desde las primeras ideas al respecto que se tuvieron en la Grecia clásica hasta los desarrollos teóricos de la Física relativista después de Einstein, incluyendo las teorías acerca de los Agujeros Blancos de Alfred Hoyle y el Multiverso de Andrei Linde. Si tales teorías resultaran acertadas, sería necesario reevaluar las consideraciones filosóficas que tenemos acerca de la naturaleza del Universo y la definición de la realidad objetiva, quedando un espacio muy amplio para especular acerca de la existencia de un nuevo campo de fuerzas que podríamos denominar “Dios”.

Hernández, Abelardo. Ciencia y conciencia. Edit. Pirámide, Madrid, 1991, 125 pp.
Otro trabajo de divulgación en el que el autor explica cómo los últimos descubrimientos de la Física Moderna están ofreciendo una imagen del Universo muy distinta a la que hasta ahora teníamos. El estudio de las partículas subatómicas podría proporcionar una explicación de los fenómenos trascendentes, bajo el principio básico de que todo y todos participamos de un nivel elemental de materia-energía en el que el tiempo es un eterno presente y la información viaja de manera instantánea, violando las reglas de la propia Física. El autor aventura la hipótesis de que a raíz de estos descubrimientos experimentales, los conceptos místico-religiosos, considerados hasta ahora como una simple fabula por la Ciencia, acabarán por mostrar su verdadero significado y su auténtica realidad. Al final, el autor hace un planteamiento insólito: considerando los inesperados resultados de los experimentos cuánticos recientes y su extraña interpretación, ¿no sería ya el momento de llevar las especulaciones filosóficas, en su sentido más amplio, a comprobación experimental en laboratorio?

Baker, Goerge; Foster, Colin; Genovés, Santiago; Laughlin, Charles; Moreno, Francisco; Morin, Edgar; Gallegos, Ramón. Lo sagrado y la nueva ciencia. El naciente paradigma holista de cara al siglo XXI. Edit. Pax, México, 1998, 155 pp.
Se trata de una colección de ensayos cuyo eje central es la exploración del cambio de modelo de conocimiento humano, desde el modelo de conocimiento científico basado en observaciones de fenómenos repetitivos, bajo un esquema mecanicista-reduccionista, hasta el nuevo paradigma holístico cuyo enfoque integra ciencia y espiritualidad, reconoce al universo como una red viva de relaciones múltiples en un proceso evolutivo dinámico e indeterminado, además de tomar en cuenta al observador. Esta unión fundamental, presente en la nueva ciencia, es también la meta de toda experiencia religiosa. Los trabajos reunidos en este texto fueron presentados durante la Conferencia Internacional sobre los Nuevos Paradigmas de la Ciencia y del Hombre, realizada en Guadalajara, México, en julio de 1997.

O’Manique, John. Energía en evolución. Plaza & Janés Editores, Barcelona, 1972, 156 pp.
Es un estudio exploratorio de los conceptos propuestos por la teoría de Teilhard de Chardin y representa una tentativa de relacionar los hechos de las ciencias naturales con los de la experiencia religiosa, bajo la premisa de que es imposible seguir conceptualizando al hombre como simple observador pasivo del Universo, y se hace necesario entenderlo como un agente activo en la prosecución y el desarrollo de un proceso evolutivo global que da un sentido y un significado al Universo, a través de conceptos como Noosfera y Punto Omega. El autor propone iniciar el desarrollo de una nueva disciplina que denomina Hiperfísica, la cual abordaría tanto los problemas de la ciencia vanguardista como los de la teología tradicional, buscando su fusión en un solo cuerpo de conocimiento.

Decelis, Rafael. Nosotros y el Universo. Costa-Amic Editores, México, 1995, 143 pp.

Se trata de un texto de divulgación en el que el autor hace un rápido repaso histórico de los logros intelectuales humanos, desde la Grecia clásica hasta nuestros días, con la finalidad de reunir una serie de conceptos provenientes de campos como: teología, filosofía, cosmología, física, química o biología, a partir de los cuales explora la posibilidad de que la materia, al ordenarse y complejizarse a sí misma, sigue una ley natural fundamental que la llevó inevitablemente hacia la autoconciencia, primero, y más tarde, a un estado muy particular del inconciente colectivo que podríamos denominar “Dios”.

Capra, Fritjof. El Tao de la Física. Edit. Sirio, Málaga, 2005, 478 pp.
Probablemente uno de los libros más atrevidos en el campo de la Física Moderna. El autor explica los sorprendentes paralelismos que existen entre la Física actual y las filosofías orientales tradicionales, a partir de lo cual propone una reinterpretación radicalmente nueva del conocimiento y de la percepción. El Universo es una eterna danza de partículas subatómicas cuyas relaciones entre sí son al mismo tiempo lógicas e inexplicables. Para el autor, la interiorización meditativa y la experimentación son dos caminos que solo en apariencia son distintos, pues cada uno de ellos, a su manera, ha llegado a las mismas conclusiones acerca del Universo y de la Realidad. En el texto se exploran los principales conceptos, postulados y teorías de la Física Moderna y se comparan con los postulados filosóficos de las religiones orientales (budismo, hinduismo y taoísmo), concluyendo que tanto la ciencia occidental como el misticismo oriental revelan la misma verdad: el Universo es un Todo íntimamente interconectado, un flujo incesante de energía del que todos formamos parte, no como individuos (en esta concepción, la individualidad se diluye), sino como procesos puntuales dentro de un gigantesco proceso mayor universal.

Molina, Néstor. Mística en la Física. Introducción a la teoría de la tercera materia. Plaza y Valdes Editores, México, 1993, 293 pp.
Otro libro particularmente atrevido. El autor (físico teórico mexicano) sugiere que la Física Moderna puede llegar a probar experimentalmente la existencia de una fuerza que podríamos etiquetar como “espíritu inmortal” a partir de una nueva modalidad de la existencia que denomina “Tercera Materia”. Propone un nuevo enfoque de la Mecánica Cuántica que superaría las paradojas planteadas durante su desarrollo (propone, por ejemplo, que la paradoja del gato de Schrödinger es superable si se aceptan las conclusiones experimentales de la comprobación de la paradoja EPR y del Teorema de Bell: la materia tiene conciencia como una característica intrínseca, a cualquier nivel y en cualquier jerarquía) y, a partir de ahí, propone también un drástico y profundo reanálisis de los principios teológicos occidentales (judíos, cristianos y musulmanes). Partiendo de los cimientos ortodoxos teológicos de las religiones monoteístas occidentales y de una nueva interpretación de los resultados de la Física Moderna, el autor finaliza su libro planteando la existencia teórica de la Tercera Materia, en cuya naturaleza no existe lo que nosotros denominamos materia-energía, por lo cual no tendría principio ni tampoco fin, pues no estaría sujeta al espacio-tiempo.

Russell, Robert; Stoeger, William y Coyne, George (comp.). Física, Filosofía y Teología. Una búsqueda en común. Edamex, México, 2002, 461 pp.
Serie de ponencias que se presentaron en el VI Encuentro Internacional de Estudios en Ciencia y Religión, realizado en el Vaticano en septiembre de 1997. 21 físicos, filósofos y teólogos de reconocidas universidades del mundo exploran las relaciones históricas contemporáneas entre la ciencia y la religión, así como las posibles formas en que estos dos campos del conocimiento humano se confrontan. Por otra parte, se realizó un acercamiento tentativo entre algunas de las ramas más actuales de la Física y la Cosmología con conceptos teológicos como “Dios”, “alma” o “creación”. Esta última parte resulta especialmente interesante, al abordar cuestiones más técnicas de la Física Moderna y su impacto en la interpretación filosófica del Universo y de nuestro lugar en él. Así, se retoman atrevidas propuestas científicas como los modelos fisicomatemáticos de un Universo vivo y su interpretación como “Dios-madre del Universo”; la teoría del Punto Omega y su implicación sobre un Dios que evoluciona; la teoría Sintérgica de Jacobo Grinberg-Zimberbaum (neurofisiólogo y físico teórico mexicano, por cierto, aunque lamentablemente desaparecido en 1996), su interpretación cuántica de la percepción y la posibilidad de teorizar acerca de la mente-alma a nivel universal; en general, se plantean los avances de la Física Cuántica desde una perspectiva filosófica y teológica. Un aspecto interesante del libro es constatar que, si bien los físicos actuales no cancelan la posibilidad de existencia de algo que podríamos definir como “Dios”, sí resaltan el hecho de que tal Dios no sería precisamente lo que esperaríamos encontrar de acuerdo a los postulados teológicos vigentes.

Greene, Brian. El Universo elegante. Supercuerdas, dimensiones ocultas y la búsqueda de la Teoría final. Planeta, Bogotá, 2001, 478 pp.
Libro de divulgación en el que el autor explica cómo las dos grandes teorías de la Relatividad y la Cuántica, que han transformado nuestra percepción e interpretación del Universo, de la Naturaleza y de la Realidad, nos han conducido al mayor problema epistemológico de la historia humana: ambas teorías son absolutamente ciertas, pero también son absolutamente incompatibles. Por esta razón resulta imperioso encontrar una teoría que unifique ambas concepciones de la existencia, una ley que unifique todo. En esta búsqueda, el autor explica las posibles soluciones encontradas y cómo una a una, han ido cayendo ante sus propias contradicciones, sobreviviendo, como la más fuerte, la Teoría de las Supercuerdas, que unifica tanto los postulados de la Relatividad como los de la Cuántica al proponer la existencia de entidades únicas, “lazos de energía” vibrantes cuyos patrones de oscilación resonante generan todo lo que existe. Pero existe un problema no resuelto: esta teoría solo es válida si existen al menos 11 dimensiones en el Universo. Sin embargo, si lograra resolverse esta limitación, la teoría explicaría de manera sencilla y elegante todo lo que existe y todo lo que ocurre, vinculándose incluso con teorías tan heréticas como el multiverso de Linde, la sintergia de Grinberg-Zimberbaum, los campos mórficos de Sheldrake, los mnemes de Dawkins y la hipótesis Gaia de Lovelock, a través de una teórica estructura fundamental del espacio-tiempo llamada “Lattice” (entramado).